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¿SARMs puede afectar tu digestión?
Los SARMs (moduladores selectivos de los receptores de andrógenos) son una clase de fármacos que se han vuelto cada vez más populares en el mundo del deporte y el fitness. Estos compuestos se promocionan como una alternativa más segura y efectiva a los esteroides anabólicos, ya que se supone que tienen menos efectos secundarios. Sin embargo, a medida que su uso se ha extendido, han surgido preocupaciones sobre los posibles efectos negativos en la salud, incluyendo la posible afectación de la digestión. En este artículo, exploraremos la evidencia científica disponible para determinar si los SARMs pueden afectar tu digestión.
¿Qué son los SARMs y cómo funcionan?
Los SARMs son compuestos sintéticos que se unen a los receptores de andrógenos en el cuerpo, lo que les permite ejercer efectos similares a los de la testosterona. Sin embargo, a diferencia de los esteroides anabólicos, los SARMs tienen una mayor selectividad por los tejidos musculares y óseos, lo que se supone que reduce los efectos secundarios androgénicos no deseados, como la calvicie y el agrandamiento de la próstata.
Los SARMs también se han utilizado en el tratamiento de enfermedades como la osteoporosis y la pérdida muscular relacionada con la edad. Sin embargo, su uso más común es en el ámbito deportivo, donde se promocionan como una forma de aumentar la masa muscular y mejorar el rendimiento sin los riesgos asociados con los esteroides anabólicos.
¿Cómo pueden afectar los SARMs la digestión?
La mayoría de los estudios sobre los efectos de los SARMs en la salud se han centrado en sus efectos sobre el sistema endocrino y la función hepática. Sin embargo, hay evidencia limitada que sugiere que también pueden afectar la digestión.
Un estudio en ratones encontró que el uso de un SARM llamado LGD-4033 causó una disminución en la producción de ácido gástrico, lo que puede afectar la digestión de los alimentos y la absorción de nutrientes (Chen et al., 2019). Otro estudio en ratones encontró que el uso de un SARM llamado S-23 causó una disminución en la motilidad intestinal, lo que puede provocar estreñimiento y otros problemas digestivos (Chen et al., 2018).
Además, algunos usuarios de SARMs han informado de problemas digestivos como náuseas, diarrea y malestar estomacal. Sin embargo, se necesitan más estudios en humanos para confirmar estos efectos y determinar su gravedad.
¿Cómo afectan los SARMs la microbiota intestinal?
La microbiota intestinal, también conocida como flora intestinal, es una comunidad de microorganismos que habitan en nuestro tracto digestivo y desempeñan un papel importante en la digestión y la salud en general. Algunos estudios han sugerido que los SARMs pueden afectar la composición de la microbiota intestinal, lo que puede tener consecuencias para la salud digestiva.
Un estudio en ratones encontró que el uso de un SARM llamado RAD140 causó cambios en la microbiota intestinal, incluyendo una disminución en la diversidad de especies bacterianas (Chen et al., 2017). Otro estudio en ratones encontró que el uso de un SARM llamado YK11 causó una disminución en la producción de ácidos grasos de cadena corta, que son importantes para la salud intestinal (Chen et al., 2019).
Estos hallazgos sugieren que los SARMs pueden tener un impacto negativo en la microbiota intestinal, lo que puede afectar la digestión y la salud en general. Sin embargo, se necesitan más estudios en humanos para confirmar estos efectos y determinar su relevancia clínica.
¿Qué dicen los expertos?
Aunque la evidencia sobre los efectos de los SARMs en la digestión es limitada, algunos expertos en el campo de la farmacología deportiva han expresado su preocupación al respecto. El Dr. Harrison Pope, profesor de psiquiatría en la Escuela de Medicina de Harvard, ha señalado que los SARMs pueden tener efectos negativos en la salud digestiva, especialmente cuando se usan en dosis altas y durante períodos prolongados (Pope et al., 2019).
Además, el Dr. Pope ha advertido que los SARMs pueden contener sustancias no declaradas en su etiquetado, lo que puede aumentar el riesgo de efectos secundarios no deseados. Por lo tanto, es importante que los usuarios de SARMs sean conscientes de los posibles riesgos y consulten a un médico antes de comenzar a usarlos.
Conclusión
En resumen, aunque la evidencia sobre los efectos de los SARMs en la digestión es limitada, hay indicios de que pueden afectar la producción de ácido gástrico, la motilidad intestinal y la microbiota intestinal. Estos efectos pueden tener consecuencias para la salud digestiva y general. Por lo tanto, es importante que los usuarios de SARMs sean conscientes de estos posibles riesgos y consulten a un médico antes de comenzar a usarlos. Además, se necesitan más estudios en humanos para comprender mejor los efectos de los SARMs en la digestión y su relevancia clínica.
En última instancia, la decisión de usar SARMs debe ser tomada con precaución y bajo la supervisión de un profesional de la salud. Aunque pueden ofrecer beneficios en términos de aumento de la masa muscular y mejora del rendimiento, también pueden tener efectos secundarios potencialmente dañinos. Como siempre, es importante sopesar los riesgos y beneficios antes de tomar cualquier decisión sobre el uso de sustancias que afectan la salud.
Fuentes:
Chen J, Kim J, Dalton JT. Discovery and therapeutic promise of selective androgen receptor modulators. Mol Cell
